Forma: en forma de pera, contiene una única semilla de color claro y redonda de 24 cm de largo que aparece recubierta con una delgada capa leñosa marrón. Tamaño y peso:. Aunque hay variedades que pesan 100 gramos y otras que pueden llegar a 2 kilogramos, las más comercializadas suelen medir 10 a 13 centímetros, con un peso de 150 350 gramos. Color: corteza, gruesa y dura, con rugosidad, tiene un color verde que varía en intensidad dependiendo de la variedad. La carne es cremosa, aceitosa, crema o de color verde pálido a blanco amarillento, muy similar a la mantequilla. Sabor: El sabor de la carne que recuerda a la colección de nuez y avellana se suele hacer a mano, y que es una fruta muy delicada. Las frutas no maduran en el árbol, pero lo hacen una vez que han sido recogidos, momento en el que pasan por una actividad respiratoria intensa (etileno desactivado), por lo que el almacenamiento durante largos períodos es un reto. Se dice que la actividad respiratoria difiere dependiendo de la variedad y madurez, las condiciones ambientales y los métodos de almacenamiento. Variedades: Comercializadas por Avocitrus: Bacon, Fuerte y Hass. Estacionabilidad: De Octubre a Febrero con suerte.

Fruta redonda ligeramente achatada, de unos 4-7 cm de longitud y entre 5 y 8 cm de diámetro. Su piel, lisa y brillante, varía desde el amarillo verdoso al rojo anaranjado, siendo el más común su color naranja. La pulpa, dividida en gajos llenos de jugo, es de color naranja, textura fibrosa y sabor agridulce. Variedades: Las variedades que nos podemos encontrar en los mercados españoles son: Satsumas (Okitsu y Clauselina), Clementinas (Fina, Clemenules y Hernandina) e Híbridos (Fortune y Ortanique). Estacionalidad: Las podemos encontrar durante los meses de noviembre a marzo.